miércoles, 20 de julio de 2011

ORTOGRAFÌA



Ortografía
(del latín orthographia y del griego ὀρθογραφία) es el conjunto de reglas y convenciones que rigen el sistema de escritura normalmente establecido para una lengua estándar.

Ortografía del español

La actual ortografía española empieza a codificarse en el siglo XVIII, con el establecimiento en 1727 de las primeras normas ortográficas por parte de la Real Academia Española al poco tiempo de su fundación. Hasta ese momento las vacilaciones en las grafías eran constantes: unos optaban por soluciones fonémicas, tratando de adecuar su escritura a la pronunciación oral, y otros se decantaban por criterios etimologizantes, manteniendo grafías que carecían de correspondencia en la pronunciación del español de la época. El resultado era una falta de unidad que dificultaba la comprensión.
Actualmente las 22 academias del español mantienen acuerdos que garantizan la unidad ortográfica. De este modo, la última edición de la Ortografía de la lengua española (1999) se ha elaborado con la colaboración consensuada de todas las academias de América y de Filipinas.
Fuentes frecuentes de problemas en el uso de la ortografía son las grafías que presentan igual sonido, como la "g"/"j", "c"/"s"/"z", "b"/"v", "ll"/"y". Otros aspectos problemáticos son la utilización correcta de los signos de puntuación y la acentuación gráfica (tildación). La ortografía del español utiliza una variante modificada del alfabeto latino, que consta de los 29 símbolos A, B, C, CH, D, E, F, G, H, I, J, K, L, LL, M, N, Ñ, O, P, Q, R, S, T, U, V, W, X, Y y Z. Los dígrafos CH y LL tienen valores fonéticos específicos, y durante los siglos XIX y XX se ordenaron separadamente de C y L, aunque la práctica se abandonó en 1994 para homogeneizar el sistema con otras lenguas. Las vocales (A, E, I, O y U) aceptan, además, el acento agudo para indicar la sílaba acentuada y la diéresis o crema modifica a la U en las sílabas gue-gui para indicar su sonoridad.
Desarrollada en varias etapas a partir del período alfonsino, la ortografía se estandarizó definitivamente bajo la guía de la Real Academia Española, y ha sufrido escasas modificaciones desde la publicación de la Ortografía de la lengua castellana, de 1854. Las sucesivas decisiones han aplicado criterios a veces fonológicos y a veces etimológicos, dando lugar a un sistema híbrido y fuertemente convencional. Si bien la correspondencia entre grafía y lenguaje hablado es predecible a partir de la escritura -es decir, un hablante competente es capaz de determinar inequívocamente la pronunciación estimada correcta para casi cualquier texto-, no sucede así a la inversa, existiendo numerosas letras que representan gráficamente fonemas idénticos. Los proyectos de reforma de la grafía en búsqueda de una correspondencia biunívoca, los primeros de los cuales datan del siglo XVII, han sido invariablemente rechazados. La divergencia de la fonología de la lengua entre sus diversos dialectos hace hoy imposible la elaboración de una grafía puramente fonética que refleje adecuadamente la variedad de la lengua; la mayoría de las propuestas actuales se limitan a la simplificación de los símbolos homófonos, que se conservan por razones etimológicas.

Ortografía técnica

Según Martínez de Sousa, la ortografía técnica comprende:
  • La ortografía especializada: se ocupa de las reglas de escritura gráfica aplicadas a todo aquello que no son estrictamente letras, como los signos, los símbolos, el ordenamiento alfabético, etc.
  • La ortografía tipográfica: La ortotipografía es el conjunto de usos y convenciones particulares con las que se rige la escritura por medio de elementos tipográficos en cada lengua. Se ocupa de la combinación de la ortografía y la tipografía y en particular la forma en que la primera se aplica en las obras impresas. Martínez de Sousa define la ortotipografía como «el conjunto de reglas de estética y escritura tipográfica que se aplican a la presentación de los elementos gráficos, como las bibliografías, cuadros, poesías, índices, notas de pie de página, citas, citas bibliográficas, obras teatrales, aplicación de los distintos estilos de letra (redonda, cursiva, versalitas, así como las combinaciones de unas y otras), etc.». Estas reglas, sin embargo, suelen ser parte de lo que se llama más propiamente estilo editorial, así como del diseño editorial, ya que pueden variar de una publicación a otra; la ortotipografía concreta su aplicación desde un punto de vista ortográfico y tipográfico.
  • La ortografía publicitaria: es la aplicación de la ortografía y de la ortotipografía a la publicidad, en la que se usa la ortografía en publicidades de radio o televisión.

PALABRAS AGUDAS, LLANAS O GRAVES,ESDRÙJULAS Y SOBREESDRÙJULAS



Palabras agudas

Son las polisílabas (de más de una sílaba) cuya última sílaba es tónica (sílaba tónica de una palabra es aquella sílaba que se pronuncia acentuada. De acuerdo a las reglas de acentuación de las palabras, la sílaba tónica puede o no llevar tilde): menú, pared, amar, sutil.


Palabras llanas (también llamadas graves)

Son aquellas cuya penúltima sílaba es tónica: árbol, volumen, fútil.


Palabras esdrújulas


Son aquellas cuyas tercera sílaba, empezando por el final de derecha a izquierda, es tónica: eléctrico, árboles, régimen, volúmenes.


Palabras sobreesdrújulas

Son las palabras cuya cuarta sílaba, empezando por el final de derecha a izquierda es tónica: repítemelo, cómanselas.

Diptongo - Triptongo - Hiato

Diptongo
Un diptongo es la unión de dos vocales en una misma sílaba, siendo al menos una de ellas débil, sin importar el orden. Ejemplos de diptongos: aire, auto, pierna.
Un hiato es lo opuesto. Es la pronunciación separada de dos vocales, perteneciendo cada vocal a una sílaba distinta. Se dice en español que dos vocales abiertas o medias (vocales fuertes) contiguas forman hiatos. Sin embargo, es más común que actúen como diptongos en el español oral. Ejemplos de hiatos: tío, púa. Línea se considera un hiato en el español normativo, pero actualmente es generalmente pronunciado como un diptongo.
Al encontrarse vocales juntas en una sola palabra, podemos estar frente a un caso de diptongo, hiato o triptongo.

Tipos de diptongos
 Formados por dos vocales débiles diferentes
Estos diptongos, llamados diptongos homogéneos, estarían formados por la unión de las dos vocales débiles (i, u):
  • [ju] como en ciudadciu-dad
  • [wi] como en buitrebui-tre
  • [ui] o [uy] como en muymuy

Formados por una vocal fuerte y una débil

Al unirse una  o abierta (e, a, o) y una débil o cerrada (i, u), siempre y cuando la débil no sea tónica (p.ej., Caín), se forma un diptongo. (Los términos "abierta" o "cerrada" aluden a la posición de los órganos articulatorios.)
Dependiendo de la secuencia de las vocales en la sílaba, se puede hablar de dos subtipos de diptongos:
Diptongos decrecientes o descendentes: formados por una primera vocal fuerte y una segunda débil. En este diptongo los órganos articulatorios pasan de una posición abierta a otra cerrada.
  • [e̞i̯] como en peinepei-ne
  • [a̠i̯] como en paisajepai-sa-je
  • [o̞i̯] como en androidean-droi-de
  • [e̞u̯] como en feudofeu-do
  • [a̠u̯] como en áureoáu-re-o
Diptongos crecientes o ascendentes: formados por una primera vocal débil y una segunda fuerte. En este caso los órganos articulatorios pasan de una posición cerrada a otra abierta.
  • [je̞] como en tierratie-rra
  • [ja̠] como en suciasu-cia
  • [jo̞] como en piojopio-jo
  • [we̞] como en puertapuer-ta
  • [wa̠] como en recuare-cua
  • [wo̞] como en residuore-si-duo
En español pueden ocurrir diptongos con dos vocales abiertas o medias. Este fenómeno es muy común en todos los dialectos del español. Aunque normativamente son hiatos, actualmente son pronunciados como diptongos por la mayoría de los hispanohablantes:
  • [a̯o̞] como en aortaaor-ta. Normativamente: a-or-ta.
  • [o̯e̞] o [we̞] como en héroehé-roe. Normativamente: hé-ro-e.
  • [o̯a̠] o [wa̠] como en almohadaal-moha-da. Normativamente: al-mo-ha-da.
  • [e̯a̠] o [ja̠] como en línealí-nea. Normativamente: lí-ne-a.
  • [e̯o̞] o [jo̞] como en MediterráneoMe-di-te-rrá-neo. Normativamente: Me-di-te-rrá-ne-o.

Algunas observaciones importantes

  • Existen 14 diptongos. Estos se forman combinando cada una de las vocales abiertas con las cerradas, las cerradas con las abiertas y las cerradas entre sí; de esta forma se obtienen los diptongos y agregándoles las consonantes para formar la palabra.
  • La "h" en medio de las vocales, ya que no produce sonido, no impide la formación de diptongo.
  • La "y" al final de la palabra tiene un valor vocálico, pues suena como la "i", así que puede formar diptongos e incluso triptongo. Sin embargo, la "y" al principio de la palabra, o en medio, mantiene su carácter de consonante; por lo tanto, no forma agrupaciones vocálicas.
  • Según la Real Academia Española, dos vocales fuertes adyacentes no forman un diptongo; se separan en sílabas distintas.

Triptongo

Triptongo (del prefijo latino tri- y del griego (φθόγγος-sonidos), literalmente "3 sonidos" o "tres tonos") es la unión de tres vocales en una misma sílaba. El triptongo se compone de una vocal débil, una fuerte y otra débil. Se rompe cuando el acento recae en una vocal débil, como es el caso de rompíais.
Ejemplos: riais, amortiguáis, aliviáis, acariciéis, despreciéis, criais, Guaiqueri, semiautomático, vieira, buey.

Acentuación de palabras con triptongo


Las palabras con triptongo siguen las reglas generales de acentuación. Así, lieis no lleva tilde por ser monosílaba (aunque pueda llevarla si se articula como bisílaba; continuéis y despreciáis la llevan por ser agudas terminadas en -s, mientras que biaural y Uruguay, que también son agudas, no se tildan por terminar en consonante distinta de -n o -s; tuáutem lleva tilde por ser llana terminada en consonante distinta de -n o -s, mientras que vieira y opioide no la llevan por ser llanas terminadas en vocal).

Colocación de la tilde en los triptongos
Triptongo es la secuencia de tres vocales que forman parte de una misma sílaba: a - pre - ciáis, co - piéis, buey. Para que exista un triptongo han de combinarse dos vocales cerradas (i, u) átonas y, en medio de estas, una vocal abierta (a, e, o): anunciáis, guau, miau, confiéis. No son triptongos en español las secuencias de vocal cerrada + vocal abierta + vocal cerrada cuando alguna de las dos vocales cerradas es tónica. Lo que hay en esos casos es un hiato seguido de un diptongo, cuando es tónica la primera vocal cerrada: vivíais (vi - ví - ais); o un diptongo seguido de un hiato, cuando es tónica la segunda vocal cerrada: limpiaúñas (lim - pia - ú - ñas).
2. Una misma secuencia de vocal cerrada átona +vocal abierta + vocal cerrada átona puede pronunciarse, en unas palabras, formando parte de la misma sílaba, esto es, como un triptongo y, en otras, en dos sílabas diferentes, es decir, como un hiato seguido de un diptongo, o viceversa; así, la secuencia iei se pronuncia como triptongo en la palabra cambiéis [cam - biéis] y como hiato + diptongo en confiéis [con - fi - éis], al menos en España y en los países americanos en los que la tendencia antihiática es menos fuerte. Sin embargo, a efectos de acentuación gráfica, cualquier secuencia formada por una vocal abierta entre dos vocales cerradas átonas siempre se considerará un triptongo, con independencia de su articulación real en una o en dos sílabas.
La tilde va siempre sobre la vocal abierta: consensuéis (con-sen-suéis), habituáis (ha-bi-tuáis), tuáutem (tuáu-tem)

Hiato

  • En fonética y fonología, un hiato es la secuencia de dos vocales que se separan en sílabas distintas, como por ejemplo “caer”, que se divide ca-er. En la I y la U se va a producir únicamente cuando estén acentuadas, por ejemplo: ríos RI-OS o poeta PO-E-TA
  • En fonética, También se puede decir que es la pronunciación separada de dos vocales, perteneciendo cada vocal a una sílaba distinta. Se dice en español que dos vocales abiertas o medias (vocales fuertes) contiguas forman hiatos. Sin embargo, es más común que actúen como diptongos en el español oral. Ejemplos de hiatos: tío, púa. Línea se considera un hiato en el español normativo, pero actualmente es generalmente pronunciado como un diptongo.
  • En métrica, un hiato se refiere a la ruptura de una sinalefa para aumentar el número de sílabas de un verso.
  • En anatomía, se refiere a un agujero de diversas formaciones anatómicas (por ejemplo, una fisura).
  • En geología, se refiere a un periodo sin sedimentación.
  • En tiempo (receso), se refiere a una pausa o interrupción en la continuidad de una obra, acción, etc.